Vicente Moreno, técnico del RCD Espanyol, y
Miguel Llambrich, lateral derecho, son campeones de invierno tras 21 jornadas en la Liga Smartbank.
La Segunda División es una de las competiciones más reñidas de Europa por la escasa diferencia de puntos que existe entre los ansiados puestos de promoción de ascenso y los puestos de descenso a 2ª B. Dos victorias consecutivas te llevan a soñar con la máxima categoría y dos derrotas te pueden llevar a abandonar la élite. Sin embargo, el club catalán dispone de una
ventaja de nueve puntos respecto al Real Sporting, cuarto clasificado.
Vicente Moreno llegó este verano con un objetivo claramente marcado, devolver al equipo a la máxima categoría y para ello contaba con uno de los jugadores representados por
Promoesport,
Miguel Llambrich. La dilatada trayectoria del técnico y los ascensos cosechados en el pasado le colocaban como una de las apuestas más seguras para las necesidades del club.
Tras 21 jornadas no ha dejado indiferente a nadie. Los pericos ocupan la primera plaza, la cual otorga el ascenso directo, son el
equipo más goleador y el
menos goleado.
Es pronto para lanzar las campanas al vuelo, pero es innegable que Vicente está cumpliendo con creces y que ha dado con la tecla. Los números hablan por sí solos. Acumula
catorce victorias y tres empates, y en los últimos nueve encuentros solo ha caído derrotado en una ocasión.
Este domingo, a las doce del mediodía, tendrá una prueba de fuego en Copa del Rey para contrastar el nivel del equipo. Se enfrentará a Osasuna, rival de primera categoría, tras haber eliminado al Burgos por 0-2.